Opinión: ‘Sevillagate’ Perdóname, he sido ingrato…
Observatorio taurino: De perdones y ausencias
Por: A. R. del Moral.
Las disculpas solicitadas por los Pagés buscan allanar el camino que aún separa a las figuras de la plaza de Sevilla. Unos y otros brillaron por su ausencia en el encuentro de la Real Venta de Antequera
‘Sevillagate’: Perdóname, he sido ingrato…
La ansiada resolución del conflicto sevillano sigue dictando titulares de trascendencia desconocida. Hace un par de semanas se conocía la condición fijada por Morante de la Puebla para guardar las pistolas de duelo. “Basta con pedirnos perdón”, proclamó el diestro cigarrero. Los Pagés parecen haber tomado nota. Su petición de disculpas -escenificada a través de una escueta nota en la que no se menciona a nadie concreto- parece seguir ese guión marcado.Morante quería una pública súplica de perdón y ya la tiene. De alguna manera, la pelota ya está en su tejado.
Entrebastidores se habla ya de otros ajustes: Luis Manuel Lozano, flamante mentor de El Juli, no estaría muy dispuesto a dejarse salpicar por un conflicto que no es suyo. Nadie duda ya del encaje de Manzanares y en el caso deTalavante, tampoco parece probable que se arriesgue a seguir jugando con las cosas de comer. La incógnita es Perera. La firmeza de su carácter y la exposición de motivos realizada en su día podría suponer un ancho abismo que le seguiría separando de la reconciliación con la empresa de Sevilla.
Un paso firme, a pesar de las ausencias
El caso es que el gran diestro extremeño -campeón de la última temporada- fue la única figura en activo que acudió al encuentro convocado por la Unión de Criadores en la Venta de Antequera. Sus más ilustres compañeros y los pesos pesados de la patronal brillaron por su ausencia.
Los rostros de Morante, El Juli y Manzanares, sumados a los de Eduardo Canorea, Ramón Valencia y las dos ramas Chopera habrían reforzado la trascendencia de una reunión que, en cualquier caso, supone un paso firme en la conquista del futuro inmediato. Sólo añadiremos un dato más sobre los ausentes: su incomparecencia revela que andan poco dispuestos a modificar el actual statu quo.
La oportunidad se sentarse a hablar juntos estaba ahí. Ojalá aprovechen las que vengan. Ya redundaremos sobre el asunto sin restar ni un ápice de legitimidad al meeting del pasado jueves. Se respiró un espíritu de familia que necesita ser materializado en la creación de un lobby profesional y convenientemente incentivado que represente y defienda las demandas comunes de todos los sectores profesionales del negocio taurino.
Nos marchamos, deseándoles una muy feliz Navidad y enviando un sincero abrazo a la familia Ponce-Cuevas. Sólo una pregunta para acabar: ¿qué hacía ayer Pepe Cutiño con Antonio Barrera -hombre fuerte de Bailleres en España- en la puerta del Ayuntamiento de Córdoba? A lo mejor ya tenemos el nombre del gerente de Los Califas…
