Comunicado
Publicado por: Hassan González
28 de Marzo 2015.- Arroyo de la Encomienda (Valladolid)
Balance: Dos orejas
Ganadería: Castillejo de Huebra
Nuevo triunfo cosechado esta tarde por Diego Ventura, en este caso, en la Plaza de Toros La Flecha, en la localidad vallisoletana de Arroyo de la Encomienda. En el tercer festival en lo que va de temporada española, el rejoneador de La Puebla del Río ha vuelto a confirmar sensaciones y a probar que está ya ante la puesta a punto ideal para los primeros grandes compromisos de la temporada. Entre ellos, los de Lisboa y Sevilla. Nueva lección de plenitud de Ventura ante un buen novillo de Castillejo de Huebra, que le ha permitido desarrollar el concepto de toreo templado y hondo que forma parte de la esencia venturista. Y todo ello, sin perder un ápice de conexión con el tendido, siendo capaz de enganchar al público desde los primeros compases de sus faenas para después emborracharlo de toreo del bueno.
Enceló pronto Diego al novillo en la cabalgadura. Lo recibió, lo convenció y lo embarcó en los vuelos imaginarios de Silencio -una de las novedades de la cuadra de 2015 aunque debutante ya en Albacete el pasado 28 de febrero- tomándole enseguida la medida precisa de su ritmo, enseñando a embestir así al de Castillejo de Huebra, de gran movilidad, para pulir después y sacarle lo mejor de su fondo. En banderillas, la fiesta fue grande. Primero con Chalana, aprovechando la embestida brava y emocionante del utrero para clavar banderillas en los mismos medios dejándoselo llegar mucho y con esa batida tan pura y tan personal de este caballo. Y después con Maño, otro potro que apenas suma su segundo festejo y que vuelve a mostrar sus tremendas cualidades en las tres banderillas al quiebro que el jinete sevillano clavó con él. De punta a punta de la plaza, con los pechos puestos por delante y quebrando cuando ya no había más remedio. Crujió la gente a más en cada uno de los tres palos. Mató con Detalle, otra de las luminosas ilusiones de 2015, y las dos orejas que concedió el palco con la misma rapidez con que los tendidos se cubrieron de blanco.
Se cumplió el objetivo para Diego y se cumplió el objetivo del festival, celebrado a beneficio de asociaciones solidarias como ADIVA, Banco de Alimentos y Proyecto Hombre. La plaza casi se llenó y el toreo puso otra vez todo de sí cuando de ayudar se trata. Y Ventura avanzó un trecho más en su empeño personal de poner los motores de su preparación a punto de cara a la gran carrera de la temporada. Una carrera donde el mejor no es el que más corre, sino el que más despacio torea. Como Ventura hoy. Como Diego otra vez…
