OVACIONADO CASTELLA EN LA FERIA DE JULIO
Su lote de toros de Núñez del Cuvillo no le dio opciones a poder redondear ninguna faena
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Valencia, sábado 26 de julio. Un tercio de entrada. 6 Toros de Núñez del Cuvillo, bien presentados, nobles, de juego muy desigual.
SEBASTIÁN CASTELLA, silencio y ovación tras leve petición.
Daniel Luque, ovación y silencio.
Román, oreja y oreja
Daniel Luque, ovación y silencio.
Román, oreja y oreja
Un año y un día después de que Sebastián Castella se convirtió en Valencia en el gran triunfador de la pasada feria de Julio, en esta ocasión su lote de toros no le dio ninguna opción a poder reeditar el éxito, pues ni el flojo primero, ni el parado y bajo de raza cuarto, fueron material idóneo para que Castella pudiera cortar las orejas.
La poca fortaleza del que abrió plaza fue bastante protestada por el público, por lo que la afición acogió con cierta distancia la gran disposición de Sebastián Castella por intentar sacar partido de ese animal.
Tuvo además poca transmisión, por lo que el diestro francés tuvo que poner mucho de su parte para construir una faena en la que se mostró muy por encima de la limitada condición del toro. Lo mató de una buena estocada y fue silenciado.
El cuarto tuvo nobleza, pero se paró pronto debido a su poca raza. Desde los primeros compases de la lidia Castella cuidó mucho al toro para medirlo y poder aprovecharlo, brindando al público su faena. El inicio, con los pases cambiados por la espalda, en los que hubo ajuste y mucha firmeza, sirvieron para meter pronto a los aficionados en la faena, aunque el toro fue muy a menos tras las primeras series. Una vez se paró el toro de Núñez del Cuvillo, Sebastián se metió en los terrenos de cercanías con gran disposición y mucho mérito, para terminar de apurar las embestidas del animal. A esto ejemplar también lo mató de una buena estocada y recibió una fuerte ovación tras leve petición de oreja.
