Diego Cruz
Rejoneo de Arte
Atractivo de Plaza México
Por: El Bardo de la Taurina
Es
galardón de las empresas taurinas el procurar ofrecer al público, la oferta más
atractiva con el actuar de quienes del desafío
de jugarse la vida hacen un arte y aún más, de los que en ello ofrecen el
atractivo de hacerlo en la alegoría de la monta a la alta escuela, que lo es el
rejoneo, el cual en su expresión más pura se detona como espectáculo mediante
el maridaje de jinete y caballos, el que hoy en día en la figura juvenil de
Diego Cruz y de su cuadra lusitana, se haya convertida en la más fresca de las
atracción del rejoneo tricolor.
Y ante
eso, la empresa del coso más grande del mundo, que lo es la Monumental Plaza
México, no está ajena y cual rosa de los vientos que se orienta hacia los
caminos de la brillantez, se deja tocar por el atractivo que significaría
cerrar en la fecha del adiós decorosamente su serial veraniego y que mejor que
hacerlo encabezado por un corcel de trazos finos, que desde ¡Ya!, es garantía de
expectación, esa que provocan los debuts cuando valen la pena y
por lo que ha mostrado este Diego Cruz
su estampa, monta y cuadra, sobran para
convertirlo en un atractivo anhelado .
Pero bien,
a estas alturas ustedes aficionados de ambos continentes taurinos que favorecen
las primicias, se estarán preguntando ¿Quién es Diego Cruz? y más aún ¿Que
ofrece taurinamente? desde
luego su curiosidad llegara al hierro y a los equinos que los lucen, así que
sin más recorramos el velo del misterio y de la curiosidad adelantando a usted
que esto tan solo serán letras engarzadas convertidas en panorámica, y si decir
que lo sorprendente, usted lo constatará cuando Diego Cruz nos diga en la Plaza
México,como lo esperamos ¡Aquí estoy!
Nacido
bajo el cielo del estado que mayor número de plazas de toros abriga que lo es
Hidalgo, este chaval que anda en la friolera de los veinte, edad en la que la adolescencia,
ya dejo la inocencia y la juventud,no se pelea con la serenidad ni con la inteligencia,
la cual le da para tener una visión torera ya solvente que ofrece como
resultado el encuentro con una promesa del rejoneo que antes de abalanzarse sobre el futuro que ya mira a
España, sabe muy bien que día a día, tiene que cimentarse y no dejar pasar el
presente, ese que lo está retando a despejar el albero de la Monumental
capitalina, ofreciendo a la empresa y a la afición, un caudal de horas
montadas, un ya haberle visto la cara a los toros en plazas que le demandaron entrega, pasión, técnica, valor
y carácter, gracias a cuyos atributos ya supo lo que es lidiar al de abajo que viste de negro y al de
arriba de multicolores expresiones pero también de exigencias, las que el
rejoneante con algo más que academia digamos pujanza y elegancia, salió airante
dondequier, y créame usted amigo que a Diego Cruz las palmas, las vueltas al
ruedo y las orejas no le han caído envueltas de regalo y sí, plenas de orgullo
de haberlas conquistado entregando el pecho de cabalgante y cabalgadura.
De su
cuadra subrayar que está conformada por caballos internacionales de primer
nivel, educados para la conquista y adiestrados para el triunfo y si no
bastaría con señalar que los equinos que se crían en la Quinta San Pedro,
propiedad de la familia del rejoneador, han conseguido tal adiestramiento que
dio para deslumbrar al mismísimo Pablo Hermoso de Mendoza, el cual adquirió
para sus filigranas a esa joya que bautizo como ‘Machete’.
Grábese
este nombre aficionado, Diego Cruz ‘El del Arte Elegante’, al que en cuanto lo
anuncien en la Plaza México, hay que irlo a verlo, pa’ ser testigo del
nacimiento de un rejoneador que hoy promete mucho, y eso ya, es mucho.