lunes, 20 de octubre de 2014

Crónica: ‘Joselito’ Adame salda con cinco orejas su encerrona en Pachuca.

José Adame ‘Joselito’ ha cortado cinco orejas en su encerrona en la Plaza de toros ‘Vicente Segura’ de Pachuca. Tarde importante para el torero de Aguascalientes ante un encierro muy terciado en su presentación y de diversas ganaderías, en donde solo destacaron los corridos en segundo lugar de Montecristo y el lidiado en quinto lugar de la ganadería de Xajay. El resto fueron de esos toros ‘modernos’ que sólo resisten una varita y a la primera de cambio escapan rumbo a las tablas cantando su condición de mansos.
Por: Juan Carlos Valadez 

Pachuca, Hgo.- La tarde estaba nublada, con amenaza de lluvia y adornada por una ligera brisa que nos recordaba que estábamos en la bella airosa capital del Estado de Hidalgo. Los ánimos encendidos; la esperanza, por los cielos y una entrada que rozaba el lleno para la encerrona de José Adame ‘Joselito’.
Así estaba Pachuca, con el pañuelo en la mano y el sueño del triunfo cuando se abrió la puerta de cuadrillas y apareció nuestro ‘Joselito’ vestido de negro y oro, y la plaza entera se puso de pie para ovacionar a su nuevo ídolo.
Casi dos horas y media más tarde, la tarde finalizaba en un tono triunfal pero dejando una sensación de haber visto una versión del torero de Aguascalientes sosa y eso a pesar de las cinco orejas cortadas.
Este triunfo no puede ocultar que la encerrona de Adame ha sido una dolorosa decepción para algunos de los asistentes y la constatación de que este torero no está aun capacitado para el lugar en el toreo en el que su administración y gran parte de la prensa se empeñan en ubicarlo.
Porque lo grave fue que aunque anduvo con ideas, se dejó ver en sus seis toros como un pegapases cualquiera. Esa sensación se acentuó especialmente con el quinto, un toro de Xajay que era para deletrear el toreo. Pero Joselito’ para ese punto de la tarde ya había agotado todo su repertorio. Mal con el capote, aunque variado, con la muleta tardo un mundo en entender a un toro con mucha bravura y transmisión.
Los mejores momentos de la tarde habrían de llegar por el piton izquierdo, donde pudimos apreciar sus buenas maneras en una serie de naturales de trazo largo y una estocada certera hasta la empuñadora, que hicieron que el juez le otorgara las dos orejas muy benévolas, pero dejo la sensación que no estuvo a la altura de las buenas condiciones del toro de Xajay.
Lo mismo paso con el codicioso astado de Montecristo que salió en segundo lugar, variado se dejó ver en el capote, aunque por momentos despegadillo. Ya con la muleta le realizó un trasteo irregular aprovechando la embestida franca y el buen tranco del astado. Al igual que con el de Xajay, lo mejor que consiguió fue con la mano izquierda por naturales, pero un tanto despegados. Cuando más reposado se le veía a ‘Joselito’ en la faena, el toro hizo por él afortunadamente sin consecuencias.
¡Que boyante fue la embestida y que fijeza tuvo el de Montecristo! Pero después del susto regreso a la mano derecha y de nuevo empezó a tirar líneas por fuera sin embraguetarse y sin rebozarse. Una oreja pareció un premio muy corto para tan larga faena y un astado de bandera.
Fatigas paso con el sexto, un toro muy serio de Fernando de la Mora, manso pero con malas ideas en las entrañas. Fue un manso de libro en el caballo, pero se adueñó del ruedo; lo dominaba todo con la mirada y, en el tercio final, fue muy exigente y desarrolló un peligro enorme, con la cara siempre a media altura y el recuerdo permanente de lo que se dejaba atrás en cada embestida. El torero se zafó como pudo, lo mató de mala manera, y seguro que no lo olvidará en algún tiempo.
Con su primero que fue de la ganadería de Marrón, un toro brocho muy justo de presentación, suave y noble, José anduvo a medio gas, lo toreo muy despegado, con las ideas poco claras y la muleta sin mucho mando. Por la euforia del ambiente y un espadazo certero el juez a petición de la afición del ‘pañuelo blanco’ le regalaron una oreja.
Con el tercero, un toro burraco e impresentable de la ganadería de Jaral de Peñas ligo un par de series con la derecha y nada más. El toro dio en general un juego imposible pero José con inteligencia anduvo por encima de él. Otro espadazo letal y otra oreja cortesía de la cofradía del pañuelo blanco de Aguascalientes.
El cuarto de Torreón de Cañas era un zapatito, muy justito de todo, pero principalmente de bravura. Con este blandengue animal con aspecto de novillo,Joselito’ ejecuto un tercio de banderillas realizando con mucha autenticidad la suerte y que levanto al público de sus asientos. Después con la muleta el toro se vino a menos para ser silenciado.
En resumen fue una tarde que pudo ser y no fue, una corrida intermitente, rota en momentos claves como sucedió en el receso que se produjo entre el tercero y cuarto; un lujo que no cuajó del todo, pero que dejó en los nuevos incondicionales de ‘Joselito’ la impresión de que se había vivido un espectáculo diferente, novedoso y emocionante.
Nada más falso e irreal.
Ficha del Festejo
Pachuca, Hgo.- Plaza ‘Vicente Segura’. Tercera corrida de feria. Casi lleno. Seis toros de diversas ganaderías: Marrón, Montecristo, Jaral de Peñas, Torreón de Cañas, Xajay y Fernando de la Mora en ese orden. Terciados y mansos en general, de los que solo destacaron los corridos en segundo y quinto lugar por su bravura y clase en sus embestidas. Todos sospechosos de manipulación de sus astas. José Adame ‘Joselito’: Oreja, oreja, oreja, silencio, dos orejas y ovación. Salio en hombros,
Incidencias: Luis Miguel González tuvo una buena tarde en varas, así como el subalterno Fernando García.
Joselito recibió un homenaje por parte del Gobernador del Estado poco antes de que saliera al ruedo el cuarto astado de la tarde.