Por: Hassan González
FECHA. 21 de septiembre de 2015
LUGAR: Plaza de Toros de La Glorieta de SALAMANCA (SALAMANCA).
ENTRADA: Dos tercios.
RESEÑA: Pablo Hermoso de Mendoza (silencio y ovación); Sergio Galán (silencio y oreja); y Miguel Moura (silencio y silencio tras aviso).
GANADERIA: Toros de Herederos de Ángel Sánchez y Sánchez.
CABALLOS UTILIZADOS:
Primer toro de la Ganadería de Herederos de Ángel Sánchez y Sánchez, número 113, 501 Kg, de nombre Ranito: De salida NAPOLEON (3 rejones de castigo); en banderillas BERLIN (2 banderillas) y VIRIATO (2 banderillas); y para el último tercio PIRATA (tres cortas y dos rejones de muerte, pinchazo y discabello).
Segundo toro de la Ganadería de Herederos de Ángel Sánchez y Sánchez, número 80, 520 Kg, de nombre Beailador: De salida BARRABAS (1 rejón de castigo); en banderillas DISPARATE (2 banderillas) y DALI (2 banderillas); y para el último tercio PIRATA (tres cortas, un par a dos manos y un rejón de muerte y descabello).
OTROS CABALLOS DESPLAZADOS: BRINDIS, BELUGA y AGORA.
COMENTARIO: Se presentaba Hermoso de Mendoza en el que era su vigesimocuarto paseíllo en La Glorieta salmantina y los hacía con los ecos del indulto del día precedente en la plaza de Nimes y con los todavía fuertes síntomas de esa gastroenteritis que no acaba de pasársele. Tarde de mucho calor, en contraposición de la gélida que resultó la de su última actuación hace una semana.
Ranito fue el primer toro de Hermoso de Mendoza, al que paró montando a NAPOLEON y con el que pudo sentirse a gusto cuando lo llevaba galopando, porque el toro atendía a los toques y obedecía. Ejecutó tres rejones de castigo, pero solo dos quedaron en el toro porque el segundo cayó a la arena nada más tocar el lomo del toro. El último tuvo la pureza y la verdad en la ejecución. Si de pureza, verdad y calidad hablamos, eso es lo que atesora este BERLIN, mezcla de sangres alemana y lusitana que volvió a sentar cátedra de bien hacer y de rematar las suertes como solo a él se le ve en el actual torero. Siempre ceñido al toro y enlazando una suerte con otra, un movimiento con otro, sin permitir tiempos muertos y sobre todo con una cadencia digna de la mejor cámara lenta. Toreo suave, para un toro suave en las embestidas pero con mucha codicia. VIRIATO también sintió pronto esa buena embestida del toro y se la metió en su capazo, como si quisiera abrazarlo y ahí, encunado llevarlo toreado, cuidándolo mucho y permitiendo que tras unos pasos se rebosara por su grupa. Fueron varios instantes de reuniones entre toro y caballo con la justeza y la precisión por bandera. Las dos primeras cortas las puso Pablo sobre PIRATA en el tercio de la plaza, reuniendo con el toro sobre las rayas de picar. Para la tercera el toros e había cerrado en tablas y tuvo que tirar con PIRATA de él hasta volver a colocarlo y dejar el tercer garapullo antes de descolgarse con desplantes y “teléfonos”. Cuando Pablo soltó la mano para clavar el primer rejón de muerte este agarró una banderilla y apunto estuvo el jinete, de su propio impulso, en resultar descabalgado. Luego vinieron dos rejones, el primero medio y el segundo entero pero muy perpendiculares y que necesitaron un golpe de descabello.
El segundo toro de Hermoso era más bonito de hechuras que el primero y por eso el navarro se confió y sacó a pararlo al novato BARRABAS. Como suele pasar, el bonito salió rana y comenzó a deambular por la plaza huyendo de caballo y capotes y asustándose de todo lo que se movía. Con esa premisa, le colocó un rejón de castigo en una de las ocasiones en que pilló al toro parado y aguantó la acometida de manso que espetó después. Debería de haberle puesto otro rejón más, pero Pablo debió de pensar que aquello era demasiado riesgo para un caballo tan inexperto y se fue por DISPARATE para comenzar las banderillas. El toro galopaba fuerte, ahora sí que con fijeza, aunque más con arreones rabiosos que con bravura. No fue un tercio lucido y DISPARATE se debió de acordar en más de una ocasión del toro Noblecito al que enfrentó ayer. Esta tarde todo eran taponazos, frenazos en las embestidas seguidos de carreras descontroladas. Con DALI lo mismo, echándole mucho valor y ganas el caballo para aguantar a un toro sin fijeza y que no sabías por donde atacaría a la próxima. En el cierre, PIRATA encontró al toro más asentado, más agarrado al suelo y lució en cortas y sobre todo en un par a dos manos que levantó algo la frialdad en el tendido. Tras el rejón de muerte, casi entero, el toro se amorcilló y aguantó mucho de pie hasta que Pablo utilizó en una ocasión el descabello, siendo ovacionado al final de la lidia.
Barrabás |
Berlín |
Dalí |
Pirata |
Pirata |
Viriato |
Napoleón |
Disparate |