sábado, 23 de agosto de 2014

IMPORTANTE ACTUACIÓN DE HERMOSO DE MENDOZA EN MÁLAGA
El navarro corta una oreja y es ovacionado

Comunicado
Publicado por: Hassan González


FECHA: 23 de agosto de 2.014
LUGAR: Plaza de Toros de La Malagueta en MALAGA (MALAGA).
ENTRADA: No hay billetes.
RESEÑA: Pablo Hermoso de Mendoza (ovación, oreja y ovación); y José Tomás (silencio, oreja y dos orejas).
GANADERIA: Toros de San Mateo (1 y 5), Parladé (2 y 6), Carmen Lorenzo (3) y Victoriano del Río (4).
CABALLOS:
Primer toro de la Ganadería de San Mateo, número 42, 508 Kg, de nombre Beterano: De salida NAPOLEON (1 rejón de castigo); en banderillas DISPARATE (2 banderillas) y VIRIATO (2 banderillas); y para el último tercio PIRATA (tres cortas y un rejón de muerte).
Segundo toro de la Ganadería de Carmen Lorenzo, número 25, 519 Kg, de nombre Veleto: De salida JUMILLANO (1 rejón de castigo); en banderillas CHENEL (2 banderillas) y HABANERO (2 banderillas); y para el último tercio PIRATA (dos cortas, un par de cortas a dos manos y dos rejones de muerte).
Tercer toro de la Ganadería de San Mateo, número 26, 585 Kg, de nombre Valenciano: De salida CHURUMAY (1 rejón de castigo); en banderillas DISPARATE (3 banderillas) y DALI (2 banderillas); y para el último tercio PIRATA (dos pares de cortas a dos manos y un rejón de muerte y tres descabellos).
CABALLOS DESPLAZADOS: BELUGA, DUENDE, BACO y SECRETO.

COMENTARIO.Llegó la tan esperada cita de uno de los carteles más importantes del año. Una tarde en la que se anunciaban José Tomás y Pablo Hermoso de Mendoza y que suscitó la máxima expectación entre los aficionados que llenaron el coso de La Malagueta y que pudieron disfrutar de los mejor de ambas tauromaquias, de tres lecciones de torear a pie y tres lecciones de torear a caballo y en la que una vez más se demuestra que para llevar público a la plaza solo hace falta imaginación para hacer buenos carteles, aunque muchos aboguen por esa competencia que dicen en las mixtas no existe. La competencia de las figuras es con ellos mismos y sea quien enfrente a ellos, nunca quieren quedarse atrás en la puerta grande. Por eso son figuras.
Esta tarde le tocó salir a pie a Hermoso de Mendoza, pero no por no poner todo, no por no tener competidor delante sino porque el rejón de muerte en esta ocasión no quiso entrar. Y Pablo salió contento, pero un poco enrabietado por dentro porque no había conseguido acompañar a Tomás en la Puerta Grande. Eso también es competencia y eso sobre todo es vergüenza torera y sobre todo después de llenar el coso de Málaga de partidarios de uno y de otro, en conjunto partidarios de la tauromaquia.
Pudo parecer sencilla la lidia del primer astado de San Mateo, pero fue el jinete el que apoyado en su gran cuadra hizo que el toro embistiera y que nunca se desengañara. Le dio la lidia medida y justa porque ya de primeras el toro manseaba y se escurría de los encuentros con NAPOLEON. Cuando el caballo lo conseguía encelar, el toro tenía calidad pero tras unos leves instantes embistiendo, enseguida huía a tablas. No cambió la cosa con el rejón de castigo, a pesar que con la bandera Hermoso lo pudo llevar más encelado y aquí el toro duraba más en el caballo, pero terminaba huyendo a tablas. Sería con la irrupción de DISPARATE cuando ya el toro se entregó y es que el caballo le dio la lidia exacta, milimétrica para que el toro no viera espacio entre él y el caballo y así tuviera una embestida continuada. Unos primeros toques de galope de costado, dieron paso a los cambios de grupa, a la celebrada “hermosina” muy ajustada como pedía el rival, y como exigían las circunstancias. No abandonó su querencia de tablas y en los tendidos de sol y sombra cayó la primera banderilla al sesgo, marcando los tiempos en la cara del toro. Continuamos con el toreo templado con “hermosinas” continuas y con mucho temple en todos los movimientos. El toro tenía un excelente son y cuando se le aguantaban los terrenos era un perfecto colaborador…..pero había que estar ahí. Aquí remató con una pirueta y tan ceñida la realizó que resultó tropezado. La segunda banderilla en los medios, atacando hacia el patio de caballos, para rematar la suerte y encelar al toro y rematar un nuevo galope al hilo de las tablas con una pirueta, ahora sí perfecta. Continuó con VIRIATO y cambiando los registros por un toreo ahora más en redondo, metiendo al toro en el vértice del estribo y galopando sobre sus pasos dando majestuosidad a todos sus movimientos y haciendo de la figura toro-caballo un solo elemento. Parecía mentira que este toro que estaba culminando el tercio era el mismo que inició la lidia, pero el buen hacer de jinete y caballo lo habían metido en la canasta de sus muletas equinas y ahora galopaba templado tratando de alcanzar a VIRIATO, que una y otra vez lo miraba y lo provocaba con la mirada. Continuaba embistiendo y se fue por PIRATA en las banderillas cortas, buscando una tras otra, sin apenas dejar que Pablo se colocara y dando a la suerte una continuidad y un ritmo inusuales y haciendo que los desplantes y la suerte del teléfono fuera repetida en varias ocasiones por la repetitividad del astado en buscar al montado. Esa  misma acometividad llevó el toro en la reunión final y Pablo acertó de un rápido y certero rejonazo, aunque cayó bajo en su colocación. Hubo petición de oreja, creemos que más que mayoritaria, pero el Presidente no lo juzgó así y no sacó el pañuelo.
Oreja que sí se concedería en el tercero de la tarde al que finiquitó de un rejonazo después de un pinchazo hondo y con el que Pablo había realizado una faena de menos a más según el comportamiento del astado. De salida fue parecido a su hermano que hizo primero, huyendo de las reuniones por lo que había que aguantarlo mucho con JUMILLANO. El caballo consiguió aguantarlo y por momentos hasta lucirse en el toreo en redondo, pero el toro siempre terminaba igual, saliendo sin rumbo del caballo. Pero salió CHENEL y cuando uno está en el momento que atraviesa el caballo, parece que todo le sirve. Al hilo de las tablas el toro galopaba y aquí CHENEL es donde comenzó a formar su lío particular con esas típicas carreras de costado y sobre todo con esos remates por los adentros a modo de trincherazo, hasta en tres ocasiones que levantaron al público de sus asientos. La suerte puede ser imitable, pero la personalidad y la agilidad del caballo son irrepetibles y esta semana de su reencuentro lo está firmando y confirmando. Enorme tercio de CHENEL con quien más colaboró el toro y que remató con dos banderillas también marca de la casa, marcando los tiempos y siempre mirando a la cara del toro, antes, en el momento y después de clavar, salió toreando de la suerte. Un magisterio de faena la de CHENEL. Pablo cambió de cabalgadura y dio entrada a HABANERO y aquí ya se vio que el toro iba a ayudar menos porque HABANERO lo necesita en los medios y aquí el toro no quería. Lució en las banderillas, pero en las piruetas, solo la insistencia del caballo hizo que en las últimas hubiera justeza y precisión porque en muchas el parado toro no hacía nada por el caballo. Con PIRATA nuevamente la faena tomó vuelo y si bien con las cortas el público estuvo de parte del navarro, fue con el par a dos manos, enorme caballo y jinete, cuando se rindió totalmente. Tras el rejonazo final y la estampa de PIRATA mirando con respeto al astado en su agonía, el tendido se pobló de pañuelos y la primera oreja cayó al esportón del estellés.  
El que cerró plaza fue el toro más fuerte de la tarde, pero al igual que sus compañeros adoleció de falta de transmisión, aunque también tuvo nobleza en la embestida. CHURUMAY pronto comenzó a encelarlo y es que este toro sí hizo pronto por el caballo. Se dejó templar y el caballo aprovechó para lucir toreando con la bandera y dejando un muy buen rejón de castigo, dando los pechos, ante el único toro que lo permitió de salida. Había que apretar y Pablo volvió a apostar por DISPARATE que volvió a poner lo mejor de sí sobre el tapete de la Malagueta. Una vez más el toro por las tablas dio lo mejor de sí y el recital de DISPARATE fue soberbio con todas las suertes de su repertorio. Pero en este toro, creo que hay que hacer incapié en las banderillas porque siempre hablamos de la “hermosina”, de los galopes de costado o de las piruetas y quizás damos demasiado poca importancia a la suerte de clavar y en este toro DISPARATE sentó cátedra también ahí. Una primera banderilla con el toro en los medios, atacando desde tablas y haciendo la suerte perfecta, tocando al pitón contrario, pasando el pecho por las astas para clavar al estribo y salir reunido con el toro. Unas décimas de segundo para realizar todos esos movimientos y todo natural. Arqueando el cuello de forma natural, sin tirones, acompañando todo con el cuerpo, no solo con el cuello. Así fue la primera banderilla, pero también la que colocaría al sesgo o la de cerró su actuación atacando de plaza a plaza, de lado a lado del ruedo extenso de Málaga. Un DISPARATE que lo dio todo, dejó paso al veterano DALI quien lo primero que hizo fue sacar al toro de su querencia con esa posada en la muestra la cola a modo de capote para llevar al toro a los terrenos precisos. Una banderilla también dando el pecho y gustándose en la suerte dio paso a piruetas en las que también faltó un poco de toro. Demasiado estático el astado quitó emoción a muchas de ellas a pesar que el caballo trataba de hacerlas lo antes posible para aprovechar esos trancos que el astado tenía. Una vez más cerró plaza PIRATA, al que en tardes como esta se merece un monumento y la ovación que el público le brindó cuando se retiraba al patio de caballo, andando, como gustándose en la ovación. En este toro las banderillas cortas fueron colocadas a dos manos, con un primer par en el tercio de presidencia y con un segundo par en lugar similar y que ante la buena acogida que había tenido el primero, el navarro repitió. Despacio se fue Pablo con el rejón de muerte, a un toro más parado para esta suerte que los anteriores y dejó el rejón arriba y en buen sitio, pensando que el toro estaba sin puntilla. El estellés descabalgó, pero quizás la hondura del toro y que al rejón le faltaron cuatro dedos para entrar del todo, hizo que no doblara y que tuviera que descabellar hasta en tres ocasiones. Al final nueva ovación saludada desde el tercio y el navarro que se fue de La Malagueta con una oreja en su haber pero con tres lecciones de toreo a caballo.  
La nota negativa del festejo resultó la herida que se produjo el subalterno navarro José Manuel Rodríguez al tratar de quitar un rejón de muerte del lomo del segundo toro de Hermoso. A Rodríguez se le aplicaron cinco puntos de sutura en la palma de la mano derecha y si bien la herida no era muy extensa, sí que tenía bastante profundidad. Fue dado de alta y viaja con la cuadrilla para su domicilio en Estella.