PABLO HERMOSO TRES OREJAS EN CÓRDOBA
Publicado por: Hassan González
FECHA: 31 de mayo de 2015
LUGAR: Plaza de Toros de CORDOBA (CORDOBA).
ENTRADA: Media plaza.
RESEÑA: Fermín Bohórquez (silencio y dos orejas); Pablo Hermoso de Mendoza (dos orejas y oreja); y Diego Ventura (oreja y dos orejas) .
GANADERIA: Toros de Fermín Bohórquez.
CABALLOS UTILIZADOS:
Primer toro de la Ganadería de Fermín Bohórquez, número 9, 520 Kg, de nombre Indultado: De salida NAPOLEON (1 rejón de castigo); en banderillas BERLIN (2 banderillas) e ICARO (2 banderillas); y para el último tercio PIRATA (3 cortas, un par a dos manos y un rejón de muerte).
Segundo toro de la Ganadería de Fermín Bohórquez, número 73, 540 Kg, de nombre Universo: De salida CHURUMAY (1 rejón de castigo); en banderillas BERLIN (2 banderillas) y DALI (2 banderillas); y para el último tercio PIRATA (3 cortas, un par a dos mano y un rejón de muerte tras pinchazo).
OTROS CABALLOS DESPLAZADOS: SANCHO, DUENDE y ZICUTA.
COMENTARIO: Decir que Pablo Hermoso de Mendoza es un referente para la empresas a al hora de contratarlo por su tirón en taquilla, sería redundar en algo de lo que ya hemos hablado en varias ocasiones. Una prueba más de ello es que en plazas donde en los últimos años no había actuado, vuelven a llamar a su puerta para confiar en que como pasó esta tarde y a pesar de que pueda parecer que no hubo una buena entrada, lo cierto es que los números se mejoraron con creces con relación a los años anteriores. Dos fueron las temporadas en las que Pablo no había actuado en el Coso de Los Califas de Córdoba y podemos decir que tuvo un feliz regreso por que obtuvo su quinta puerta de Los Califas, una de las grandes del circuito taurino nacional.
Obtuvo dos orejas en su primera actuación, donde tuvo una faena marcada por la suavidad del toreo y por la templanza, sin estridencias y dando al toro el aire que necesitaba su marcada justeza de fuerzas. Noble y codicioso, al toro de Bohórquez había que medirlo y cuidarlo para que durase porque la calidad la dejó patente en la forma que se enredó con la cola de NAPOLEON en los primeros compases del tercio inicial. NAPOLEON conectó inmediatamente con el tendido y con apenas dos muletazos con la cola, la cosa ya empezaba a elevarse. En cuanto el toro se fijó, aquello fue una ruleta frenética detrás de la cola del caballo, girando ambos animales en los terrenos de una moneda y arrancando las primeras y serias ovaciones de la faena. Se fue raudo Pablo con el primer rejón de castigo, cuarteando, pero enseñando el pecho porque no quería agotar al toro y aprovecharlo en banderillas. La templanza y buena disposición de BERLIN comenzaron a marcar una faena que se venía para arriba. Los primeros lances fueron toreando con la cola de costado, llevando muy despacio al toro para que no se desengañase. En las banderillas había que llegarle muy cerca y muy despacio, sin forzarlo, porque podía terminar en el suelo. BERLIN hizo todo de verdad, pero con mucha suavidad y saliendo siempre de la suerte sin movimientos bruscos. Continuaría en la misma tónica, pero con otro tipo de toreo diferente, el bayo ICARO, cerrando al toro con el cuerpo, dándole la cara y obligándole a embestir sin violencia, sin giros fuertes, sino más bien retrocediendo sobre sus propios pasos. Gran ovación para despedir a ICARO que cedió el testigo a PIRATA, quien continuó con la lidia colocando tres banderillas cortas, recibiendo a un toro que se venía a buscarlo y con el que el caballo reunía los palos con prontitud y ajuste. Recibiendo al toro en el estribo fue como colocó un gran par a dos manos, en el tercio. Con el rejón de muerte en la mano y como acostumbra en las últimas actuaciones, sacó al toro a la zona de los medios y ahí sin ventajas de terrenos, es donde se reunió y donde recetó un rejonazo en todo lo alto que hizo que el astado rodase sin puntilla y las dos primeras orejas de la tarde cayeran del lado del jinete de Estella, ante un toro que en su comienzo, el jinete había brindado al empresario y apoderado mexicano Alberto Bailleres presente en una barrera de sombra.
Si no obtuvo otras dos en el quinto no fue porque no las mereciera, sino por un pinchazo previo, lo que también podemos decir que en otros casos no se tuvo en cuenta, porque hubo orejas hasta después de descabellar. Pero nada de eso quita méritos a una tarde en la que Pablo pudo mostrar su madurez y su torería y en esta segunda ocasión ante un toro al que tuvo que meter en cintura con CHURUMAY, porque de inicio no tenía la fijeza del anterior. Le metía la cola el caballo y el toro salía suelto las primeras veces, hasta que ya no quedó más remedio que encelarse y CHURUMAY pudo mostrar lo torero que lleva dentro. Con el toro rebosándose por los cuartos traseros del caballo, CHURUMAY giraba y se dejaba llegar al toro. Un rejón de castigo, que por momentos parecía no iba a ser suficiente, pero que el andar de la tarde se comprobó que fue un acierto. Nuevamente apareció BERLIN para volver a dejar muestras de su enorme calidad y ahora poder disfrutar mucho más de su galope de costado, porque el toro tenía más fuerza y más continuidad. Nuevamente marcó perfectamente los tiempos en las banderillas, asomándose al balcón de los pitones en cada embroque y dejándose llegar al astado hasta el mismo pecho. Bien BERLIN, dejó su espacio a un DALI que conecta con el público a poco de pisar el albero. Es impresionante como gusta la forma de encelar con la cola, esa especie de posada que hace en la cara del toro, mostrando la cola al astado para arrancarlo y colocarlo en suerte. Bordó esa suerte y bordó las dos banderillas que colocó, así como las piruetas que aprovechando el son del toro, pudo hacer en terrenos comprometidos. Quedaba el cierre de PIRATA y comenzó con las cortas a una mano, con el caballo comprometido y con otro gran par a dos manos, para lo cual, el propio caballo sacó al toro de tablas y lo colocó en el tercio como si tuviera un capote. Cerró con pinchazo y rejonazo, ambos en lo alto y la tercera oreja y el derecho a salir por la Puerta de Los Califas, se lo había ganado con creces.