martes, 26 de mayo de 2015

Palomo Linares: Hay dos tardes hitos en mi carrera...

PALOMO LINARES: HAY DOS TARDES HITOS EN MI CARRERA, EN MADRID Y LA MÉXICO, AHÍ TAMBIÉN LE CORTÉ UN RABO A UN TORO DE GARFIAS

Publicado por: Hassan González

El veterano torero Sebastián Palomo Linares ha recibido un homenaje en la plaza de toros de Las Ventas al cumplirse el 45 aniversario de la histórica tarde que realizó en el coso madrileño el 22 de mayo de 1972; tarde en la que cortó las dos orejas y el rabo al toro Cigarrón, de la ganadería de Atanasio Fernández. El acto de reconocimiento y “descubrimiento del azulejo” ha estado presidido por el Consejero de Presidencia, Justicia y Portavoz del Gobierno de la Comunidad de Madrid, Salvador Victoria, que a su vez ocupa el cargo de presidente del Centro de Asuntos Taurinos y cuyo director gerente, Carlos Abella, fue el encargado de presentar y moderar.
LAS VENTAS HOMENAJE A PALOMO LINARES
Palomo Linares ha recibido el galardón acompañado por su actual pareja, Concha Azuara, su hijo Miguel Palomo Danko, el periodista y amigo Federico Sánchez Aguilar, quienes fueron sus apoderados, Pablo y Eduardo Lozano, y el diestro mexicano Eloy Cavazos, entre otras muchas personalidades del mundo taurino que han acompañado al maestro en la sala Antonio Bienvenida de Las Ventas.
El maestro ha descubierto su azulejo en el pasillo de Las Ventas, en las galerías de los tendidos bajos de la plaza. El mosaico se encuentra colocado junto al de su rival y compañero en los años setenta,Manuel Díaz El Cordobés.
La leyenda del azulejo recuerda la importante tarde de aquel mayo del 72: La Comunidad de Madrid a Sebastián Palomo Linares, en recuerdo de aquel 22 de mayo de 1972, en el que le fueron concedidas las dos orejas y el rabo del toro Cigarrón de la ganadería de Atanasio Fernández.
Sebastián Palomo comienza así a formar parte del repertorio de toreros homenajeados en Las Ventas como han sido Manolo y Pepe Luis Vázquez, Curro Romero Diego Puerta, Antonio Ordóñez , Rafael Ortega, Ruiz Miguel, El Litri, Andrés Vázquez, Paco Camino, El Viti, César Rincón, Manuel Vidrié, Julio Aparicio, Luis Miguel Dominguín, Marcial Lalanda, Antonio Bienvenida, Nicanor Villalta y Domingo Ortega.
EL EX TORERO ESTUVO ARROPADO POR SU PAREJA, CONCHA AZUARA Y SU HIJO MIGUEL
Se vio muy emocionado al torero al recordar a su familia, a los creadores de su éxito, a su equipo, con los hermanos Lozano a la cabeza, a partidarios y detractores, a Madrid, y sobre todo, a la antigua plaza de toros de Carabanchel, su Chata, la que le vio nacer como torero y le dio su primera oportunidad.
Gracias a su ambición de querer llegar a ser figura del toreo y a la buena dirección con la que le llevaron los que siempre estuvieron a su lado, el diestro quiso recordar las tardes más importantes de una trayectoria que tuvo su punto más alto en la década de los setenta. A lo que quiso añadir que una figura del toreo no se hace sola, necesita también de gente que confíe en ti. En ese sentido soy un afortunado, porque siempre me he rodeado de los mejores. Aliviaban mis miedos, frenaban mis impulsos y creían ciegamente en mis posibilidades. Yo no opinaba, solamente tenía que pensar en prepararme y en el toro.
Como torero, el de Linares fue un fenómeno mediático, con un arte y una torería que le llevaron a lo más grande del toreo, con dos tardes importantísimas en su carrera: la que hoy ha sido motivo de reconocimiento y la que protagonizó en la Monumental de México, también en 1972, donde cortó el rabo al toro Tenorio de la ganadería de Garfias. “Estas dos tardes en Madrid y México han sido los dos hitos de mi carrera, tanto que hasta conservo aún los dos rabos en mi casa. Fue lo más grande de mi vida, los dos puntos de expansión de una carrera en la que he logrado también triunfos rotundos en innumerables plazas de España y América “, ha mencionado el torero.
También, ha reconocido que mi vida ha sido muy complicada, pero gracias a Dios también me supo recompensar. Este homenaje que brinda hoy Madrid reconoce a una persona ambiciosa, e incluso molesta, en ocasiones, en el ruedo. Fui torero de raza y de no entablar amistades, pero ahora siento como nunca el cariño y el respeto de toda la familia taurina”.
PALOMO LINARES: “ESTOY MUY FELIZ, MUY CONTENTO, ILUSIONADO, Y SOBRE TODO LLENO DE RECUERDOS BONITOS”
Enhorabuena ¿Qué se siente en un día tan especial?
PALOMO LINARES: Estoy muy feliz, muy contento, ilusionado, y sobre todo lleno de recuerdos bonitos.
¿Cómo recuerda aquella tarde?
P.L: Fue una tarde de las cumbres que haya podido tener en mi carrera porque fue una tarde redonda. Le corté al primer toro las dos orejas y luego tuve la fortuna de cortarle el rabo al segundo. La verdad es que eso no se sabe hasta que no lo tienes en la mano. Yo soy el que lo puede decir, pero no es fácil. Encajas muchas piezas y ese día se juntaron todas para poder cortar el rabo.
¿Y en el momento en que usted le mata y el toro se lanza a por usted?
P.L: El toro me cogió, pero no pasa nada, había que matarlo como fuese a la primera.
“ESTÁS EN LA PLAZA DE LAS VENTAS, TODOS LOS QUE NOS VESTIMOS DE LUCES TENEMOS ESE SUEÑO Y ES UNA REALIDAD HOY”
 ¿Sigue teniendo el traje?
P.L: Sí, sigue igual, roto, como me lo quité está. También está la cabeza del toro, está el rabo, la espada con la que lo maté* está todo. Para mí esto es un sueño. Estás en la plaza de Las Ventas, todos los que nos vestimos de luces tenemos ese sueño y es una realidad hoy.
¿Qué consejo le daría a los toreros de ahora?
PL: Lo de siempre, que quieran superarse siempre.
¿Cree que ha llegado tarde este azulejo?
P.L: No, ha llegado cuando tiene que llegar, creo que mi carrera está ahí, es bonito porque este año hace 49−50 temporadas de matador de toros.
¿Tiene uno el gusanillo todavía como torero?
P.L: Sí.
¿Cuándo va a los toros se tiraría al albero?
P.L: Esto no es un gusanillo, es una solitaria. sí. El que sale torero, quiere ser torero desde que nace y yo siempre quise ser torero. Jamás he dicho que me retiro de los toros, quería ser torero, soy torero y seré torero porque no me he retirado jamás.
¿Echa en falta que la saga Linares no haya continuado?
P.L:Sí han toreado. uno novillero y el otro tomó la alternativa. Para estar en el mundo del toro tienes que vivirlo, sentirlo plenamente. Cada uno sabe hasta dónde puede llegar. Luego ya vendrán nietos, bisnietos… ¿quién sabe? esperemos que la fiesta siga de por vida y alguno con sangre de Palomo Linares yo creo que será y querrá ser torero.
“ALGÚN NIETO CON SANGRE DE PALOMO LINARES YO CREO QUE SERÁ Y QUERRÁ SER TORERO”
Cuando ha recordado todos esos momentos en la plaza ¿qué es lo primero que se le ha venido a la mente?
P.L: Los momentos que viví porque uno lo tiene todo en la mente. Además esta es una profesión que se te va quedando grabado todo lo que haces y es como si hubiese sido ayer. Yo no me puedo acordar a lo mejor de lo que cené anoche, pero de todo lo que he toreado en mi vida sí.
Le vemos arropado por su familia, por su hijo, por su pareja, su apoyo es incondicional ¿no?
P.L: Por supuesto, y los amigos, muchos amigos, muchos aficionados, mucha gente.
¿De qué no ha podido usted disfrutar tanto por haberse centrado tanto en hacer una corrida detrás de otra?
P.L: Yo he disfrutado siempre porque era lo que quería hacer. Empecé de muy niño y mucha gente dice que eso te hace más raro porque yo no he tenido niñez, pero para mí torear era disfrutar y era lo que realmente quería hacer. Te das cuenta cuando va pasando el tiempo que qué pequeños y qué poco duramos porque lo que ahora estamos viendo de hace 43 años parece que fue un sueño, que fue ayer.
¿Usted llevaba a sus hijos a la plaza?
P.L: Sí claro. Yo he llevado a mis hijos a las plazas y a los toros y a los tentaderos conmigo por supuesto, los días que no tenían colegio, eso ante todo.
Fuente: Europress